acordarse de vivir viva

Acordarme de vivir viva,  

De abrirme a lo que me trae la vida, 

a lo que este instante vive, ante mis ojos, ante mi mi mirada, percepción, 

darme cuenta, que rechazo, que me anhelo, que te anhelo, que anhelo la vuelta al verdadero hogar,

 a la vez que me aferro a todo lo que rechazo, a fin de cuentas el apego, el rechazo son anhelos, 

la ilusión de un soñar que sea diferente, que yo sea diferente, que el otro sea diferente,

 hacer o decir de más o de menos, no me hace mejor, ni peor, 

solo me muestra una y otra vez, toda mi ignorancia, la sabida y la ignorada, 

no soy y soy a la vez, 

cada vez estoy mas fragmentada,

 quizás se trate de eso, 

hasta que cada fragmento sea imposible de volver a fragmentar,

 porque ya se ha disuelto,

 no sabemos nada, me dice una voz que viene de algún lugar, 

descubro que el qué mas cree estar conectado, consciente, evolucionado...

solo mantiene una creencia, aunque quien sabe?, 

estamos donde estamos, 

habitando un lugar sagrado llamado vida, 

anhelando siempre algo, 

 una llamada de teléfono, un amor, una despedida, una curación, un viaje, una pareja...

 siempre algún anhelo, 

olvidando la autenticidad de la vida que se esconde detrás de la vida, 

detrás del anhelo, de la mirada, del recuerdo o ilusión, 

nos ganamos y nos vencemos, nos vendemos y nos compramos a nosotros mismos, 

estamos y nos vamos, venimos y nos distanciamos, recogemos y soltamos, anhelos de algo que llamamos supervivencias. 

Nos volvemos locos imaginando como seria sí..... 

y ahí estamos subiendo montañas, recorriendo ríos, paseando por orillas, escalando piedras, atravesando túneles, 

la oscuridad en realidad, 

no nos asusta, 

nos asusta lo que esconde,

 la visión perfecta, 

el vernos como somos, 

en totalidad, porque aún no sabemos que hacer con ello, 

porque esperamos, quizás, 

ver que hará el otro, 

y el otro, querida niña, 

está tan a oscuras como tú,

 tan temeroso a lo que esconde la oscuridad como tú.